






La presidenta del comité cívico de Bermejo Jimena Monroy, destacó la obra señalando que era una necesidad, ya que al margen de contarse con un nuevo corregimiento se liberaba las instalaciones de la casa de la cultura donde antes funcionaba el corregimiento posibilitándose ahora que los niños y jóvenes le den el uso para el que fue construido. Además pidió a las autoridades que se pueda concluir varios edificios que al momento están en ejecución, lo que demostrará un verdadero avance de la ciudad.
En la inauguración, Lea Plaza, destacó la construcción de la nueva infraestructura al señalar que este edificio no sólo servirá para mejorar la atención a diversos sectores sociales de la segunda sección de Arce en cuanto a requerimientos y demandas, sino que albergará al primer ejecutivo seccional elegido por voto popular como producto del proceso autonómico impulsado por el gobierno departamental.
Incluso dijo que este edificio es más bien una respuesta a la persecución que hace el gobierno nacional a las autoridades y ex autoridades departamentales, quienes a principio de esta semana fueron llamados a prestar declaraciones informativas por una supuesta irregularidad en el uso de recursos para la aprobación de los estatutos departamentales.
“Desde el primer día de junio tendremos instalada toda la estructura institucional que viene a ser parte de la construcción de nuestra autonomía”, afirmó Lea Plaza, a tiempo de señalar que el edificio será el seno de futuros encuentros entre autoridades y sectores institucionales y sociales donde decidirán su propio futuro y el destino de sus inversiones.
Lea Plaza dijo que el programa responde a una necesidad de preservar la salud identificada en el binomio madre niño que comenzó con el programa Bebé churo y sanito y que ahora se complementa con el suplemento alimenticio destinado a las mamás, al entender que en este período es también un momento en el que el nuevo ser corre serios riesgos de desnutrición.
En este escenario es que se distribuyó las primeras unidades de suplementos alimenticios que beneficia a todas las madres, desde el momento de la gestación hasta seis meses después de haber dado a luz a su niño. A partir de esta entrega, Lea Plaza confía en que los futuros recién nacidos lo harán en condiciones favorables de nutrición que le permitirán encarar su propia forma de vida de mejor manera.
“Estos programas son parte de una serie de programas que impulsa la prefectura para mejorar la calidad de vida de la gente”, afirmó Lea Plaza, a tiempo de explicar que esto también representa un modo más equitativo de redistribución de los recursos que recibe el departamento y que no siempre tuvieron acceso a este tipo de servicios.
En este caso se estima que en Bermejo se beneficiarán por lo menos 1200 madres quienes recibirán el equivalente a 750 bolivianos en suplemento alimenticio, desde que se inicia la gestación hasta que nace el bebe. Agregó que este se complementará con el programa bebe churo y sanito destinado a la alimentación de los infantes de 6 a 24 meses de edad.
Zaida Orellana fue la encargada de agradecer a las autoridades a nombre de las futuras madres, señalando que nunca nadie se había acordado de las mujeres gestantes y ahora pueden sentirse tranquilas porque podrán alimentarse con estos suplementos que a la larga redundará en sus hijos.
“Este es un primer logro de lo que son ustedes el asentamiento Tarijeños en Progreso”, dijo Lea Plaza a tiempo de señalar que también son el reflejo de la carencia que viven muchos tarijeños y que en muchos casos el estado los ha desatendido.
A esto agregó la instrucción a la Delegación para la Vivienda y Servicios Básicos y Secretaría de Obras Públicas para que en forma conjunta trabajen en el diseño de un puente que garantice la comunicación vial entre esta zona con el resto de la ciudad, respondiendo a una demanda de las aproximadamente mil familias existentes en el lugar.
“La verdad que teníamos una vida sacrificada pero ahora estamos muy contentos”, dijo Ana Ramírez de la junta vecinal al señalar que ahora tendrán a disposición bastante agua para todos.
“Estamos contentos ahora porque tenemos agua y ya no vamos a sufrir más como los tres años que estamos aquí”, dijo Martha Espindola al recordar que para tener agua debían recurrir a diferentes acciones como trasladar agua en bidones y hasta en carretillas, tarea obligada para asear a los niños para que concurran a la escuela.
Santiago Romero agradeció a las autoridades departamentales por la inauguración del pozo mostrándose esperanzada en que más adelante la zona donde se ubican pueda contar con otros servicios como la energía eléctrica de manera que puedan mejorar sus condiciones de vida.